Santa Teresa de LisieuxDescribiendo su alma como una niñita de tres o cuatro años de edad, cuyo pelo y vestido desordenados la hacían sentirse avergonzada de presentarse ante el riel del altar a recibir a Jesús. Sin embargo, apela a la Santa Madre, "e inmediatamente,- escribe la Santa,- la Virgen María se ocupa en mí. Rápidamente reemplaza mi vestido sucio, recoje mi pelo con un listoncito hermoso, y le agrega una simple flor ... Esto es suficiente para hacerme atractiva, y me permite tomar mi lugar sin bochorno alguno en el banquete de los Angeles."82twg© |
Iglesia Católica - Sagrada Eucaristía
El Trabajo de Dios
www.theworkofgod.org/Spanish