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El Padre Nuestro - Meditado
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Autor:
José de Jesús y María
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Padre nuestroPadre santo, padre bueno, papito Dios. Aquí estoy, soy tu hijo pródigo, he pecado contra el cielo y contra ti, no merezco ser tu hijo. Por eso vengo ante ti con un corazón humillado y contrito. Recíbeme con tu abrazo paternal, cobíjame con tu amor infinito.
Vengo ante ti para recibir tu luz, tu consejo, tu gracia, tu bendición y tu permiso para que pueda hacer todo en tu santa voluntad.
Tú que estás en el Cielo, yo elevo mi espíritu para estar en tu presencia y para adorarte en Espíritu y en verdad. Tú estás rodeado de luz inaccesible, majestad incomprensible y gloria infinita y eterna.
Santificado sea Tu nombre; vengo a adorarte con la Virgen María, los ángeles y los santos. Santo, Santo, Santo, Santo es el Nombre del Señor, Dios Todo Poderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, Dios Omnipotente, Omnipresente y Omniciente. Llenos están el cielo y la tierra de tu Gloria, Hosanna en las alturas. Bendito el que viene en el Nombre del Señor, Hosanna en las alturas.
Santo eres, Santo eres, Santo eres, Santo Nombre de Jesús, Santo de los santos, Nombre de los nombres, Dios de dioses, Luz de luces, Espíritu de los espíritus, Poder de poderes, Voluntad de las voluntades, Rey de reyes, Señor de señores, Amor de los amores, Fuego de los fuegos, Tesoro de los tesoros, Yahvé Sabaot, Yo soy quien Yo soy, Jesús. Llenos están el Cielo y la tierra de tu Gloria, Hosanna en las alturas, bendito el que viene en el Nombre del Señor, Hosanna en las alturas.
Venga a nosotros Tu Reino; brilla Señor tu luz en nuestras almas y reina en nuestra vida. Que pueda la Paz, el Amor y el Gozo reinar en nuestros corazones, que pueda Tu Reino de santidad, justicia, verdad e integridad reinar sobre la tierra. Reina Dios Padre y llénanos de tu divina voluntad y todos tus atributos. Reina Señor Jesús y llénanos de tu Santa Palabra, de tu Divina Misericordia, de tu Sabiduría Eterna y de todos tus atributos divinos. Reina Dios Espíritu Santo, llénanos del amor del Padre y de todos tus atributos divinos. Reina tú también madre santísima, trono de la Santísima Trinidad en nuestras vidas.
Hágase Tu Voluntad, así en la tierra como en el cielo. Que nos volvamos tus esclavos de Amor y aceptemos Tu voluntad porque es perfecta. Que no sea mi voluntad Señor, si no la tuya. Que se haga tu voluntad en todos nosotros así como en Jesús y María.
Dános hoy nuestro pan de cada día; Padre Generoso, concédenos nuestro pan físico y espiritual diariamente. Alimenta nuestros cuerpos, danos la salud, alimenta nuestras almas con el pan de la vida. Dale a los pobres, necesitados, víctimas de la guerra, del hambre, de las injusticias, de las calamidades y de todos los desastres naturales. Dale Señor a los que te piden, a los que necesitan, danos el pan de la vida, Jesús Eucaristía, y danos buenos sacerdotes.
Perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; Nos arrepentimos de nuestros pecados y pedimos tu perdón; en tu santo nombre le perdonamos aquellos que nos han ofendido. Limpia nuestros corazones Señor de todo resentimiento.
Aquí en la cruz con Jesús crucificado pido por todos mis hermanos haciendo mías las palabras de Jesús: “Padre perdónales, porque no saben lo que hacen.”
No nos dejes caer en tentación, Señor, danos la gracia de permanecer en tus manos, cúbrenos con tu preciosa sangre, cúbrenos madre santísima con tu manto y con tu luz.
Y líbranos del mal. Reconocemos que somos tan débiles Señor, por favor protégenos de toda maldad, protégenos del enemigo que quiere nuestra perdición, no nos dejes caer en sus manos.
Amén. Así sea, que no sea nuestra voluntad sino la tuya, Señor, encárgate de todo. |
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El Padre Nuestro - Meditado
Apostolado del Trabajo de Dios - tdo©#85
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