Háblame O Señor, tus palabras son palabras de vida eterna. Jesús:
Si, mi palabra te da vida eterna.
Mi palabra es muy ponderosa. Lleva mi palabra a tu corazón como una poderosa semilla que crecerá para ser un poderoso árbol. Este será el árbol de la vida, un árbol de conocimiento del bien y del mal, un árbol que no se arrancará sino que crecerá para la vida eterna, Yo lo nutriré personalmente. Crece hijo mío, da vida y conocimiento a los demás, se fructuoso y multiplícate, así dale Gloria a Dios.
Mensajes de Jesús, María y Dios el Padre. |