Jesús:
Yo soy la luz del mundo.
Yo soy no solamente la causa de la luz visible, sino que soy la luz de la bondad, justicia, integridad, paz, gozo, sabiduría y cualquier cosa buena que tu puedas pensar. Esta luz invisible es mi presencia, y eso es lo que lo que Yo te pido que lleves en tu corazón.
Así que cuando Yo digo que tú eres la luz del mundo, te estoy diciendo que tienes que llenarte con mi bondad y que tienes que brillar mi presencia en tus buenas obras a los demás.
Tú eres una antorcha viviente, un faro de luz, un portador de mi luz, tienes que reflejarme al mundo. Brilla mi querido hijo y Yo te aseguro que tu luz nunca se apagará, sino que brillará por toda la eternidad.
Mensajes de Jesús, María y Dios el Padre. |