Jesús:
Ven hijo mío, entra al templo de mi Gloria, al Trono de la Santísima Trinidad, al Inmaculado Corazón de María.
Ven hijo mío, para que seas purificado en este templo de adoración, entra a éste Cielo de Dios y de los hombres, ven a éste refugio misericordioso de los pecadores que fué abierto a todos cuando yo dije: Ahí está tu madre.
Mi Madre es la Madre de Dios porque Yo soy Dios, y Ella se volvió la Madre de la Humanidad porque Yo me volví hombre para hacerlos a ustedes mis hermanos, hijos de Dios e hijos de mi Madre.
Ella es la perfecta imagen de la Santísima Trinidad, el Esplendor de mi Gloria, Aquella en quien Yo quiero que todos ustedes sean formados en mi imagen de Cristo.
Cristo és el hombre perfecto, ningún otro hombre puede ser perfecto a menos que sea formado en el Vientre Espiritual de María mi madre amada.
Ella es el más hermoso regalo que Dios le ha concedido a su creación, Ella es la criatura humilde y perfecta que ha cumplido perfectamente la Voluntad de Dios.
Ningún angel, ni espíritu, ni criatura ha glorificado la Santísima Trinidad como mi Madre.
Ella es el Arca de la Palabra de Dios, prefigurada por el arca donde se guardaban las tablas de la Ley, Ella és el Arca de su Salvación prefigurada por el Arca de Noé, Ella és el Arca de la Alianza porque Ella me llevó en su vientre, y puesto que Yo vine al mundo a través de Ella, ustedes tienen que venir al Cielo a través de Ella, porque Yo asumí carne y sangre de Ella y en su Alianza con Dios ustedes tienen que comer de mi carne y beber de mi sangre que viene de mi Madre.
Ella es el Santísimo Tabernáculo de Dios, La Santa de los Santos. Ella es la Ciudad de Dios, la Madre Sion, cuyos hijos son aquellos que hacen la voluntad de Dios y guardan sus mandamientos.
Ella es el gran secreto de la Sabiduría, porque cuando tu la conoces y la amas, tu conoces y amas a Dios; cuando tu le sirves y la honras, tu sirves y amas a Dios; recuerda mi mandamiento: Honra a Dios tu Padre y honra a María tu Madre.
La adoración más perfecta que se le puede dar a Dios es hecha en el Inmaculado Corazón de María, la Reina y Señora de toda la Creación por decreto mío.
Nadie que venga a mi Madre es rechazado por Mi, porque Su Voluntad es Mi Voluntad.
Ella es la mas grande abogada de los pecadores y la dispensadora de mi Misericordia y de mi Gracia. Ella es el camino más facil hacia Mí su Dios, porque Ella es la única que es digna de pararse ante mi Presencia para rezar por su salvación, Ella es Aquella sin Pecado.
Así que vengan a mi Madre todos ustedes los que son pecadores, encuentren a su Madre, su amiga, su abogada; dobleguen su orgullo y vengan humildemente a Ella todos ustedes los que necesiten ayuda, séan socorridos ahora porque Ella es la Luz de mi Misericordia.