Niño Jesús con mi camisa puesta
Vi el niño Jesús de unos 8 o 9 años, tenía puesta una de mis camisas favoritas. Lo vi muy gracioso porque le colgaba la camisa un poco en los hombros.
Esa noche durante mi adoración yo le pedí al niño Jesús que me confirmara esa visión.
Resulta que mientras oraba tenía una imagen pequeña de 4 centímetros en mi mano izquierda, la cual tiene como una cobijita blanca que es con la lo acostamos en su cunita de algodón. En mi mano derecha tenía el crucifijo y así hice mis oraciones de reparación por unos cuarenta minutos, cuando terminé me iba a parar de la silla y miré al suelo, allí vi algo blanco, pensé que era tal vez papel higiénico doblado, lo toqué y me di cuenta que era la cobijita del niño Jesús que se había caído, luego la recogí y me di cuenta que ya no tenía el niño Jesús en mi mano izquierda, empecé a buscarlo con mi mano por el suelo, pero no lo encontré, pensé que podía estar sobre mi regazo, porque yo estaba sentado, pero no lo encontré. Como durante mis oraciones en la noche yo uso una camisa gruesa encima de mi pijama para no resfriarme, busqué debajo de ella y allí encontré el niño Jesús en mi regazo.
Me sonreí y me acordé que le había pedido al Niño Jesús que me confirmara la visión de la camisa, y según esto, parece que al Niño Jesusito le gusta estar debajo de mi camisa. Que hermosura, no puedo precisar en que momento se salió de mi mano.