Meditaciones Eucarísticas - Domingo lista |
La Presencia Real. Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad
Juan 6:50 este es el pan que baja del cielo, para que quien lo coma no muera. Juan 6:51 Yo soy el pan vivo, bajado del cielo. Si uno come de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo le voy a dar, es mi carne por la vida del mundo." Juan 6:52 Discutían entre sí los judíos y decían: "¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?" Juan 6:53 Jesús les dijo: "En verdad, en verdad os digo: si no coméis la carne del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. Juan 6:54 El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna, y yo le resucitaré el último día. Juan 6:55 Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre verdadera bebida. Juan 6:56 El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí, y yo en él. Juan 6:57 Lo mismo que el Padre, que vive, me ha enviado y yo vivo por el Padre, también el que me coma vivirá por mí. Juan 6:58 Este es el pan bajado del cielo; no como el que comieron vuestros padres, y murieron; el que coma este pan vivirá para siempre." Cuando reconocemos la Presencia de Cristo en la Sagrada Eucaristía, reconocemos su cuerpo, sangre, alma y divinidad. Entramos en la Presencia de Emanuel, Dios con nosotros y es precisamente Cristo crucificado que ofreció su sacrificio al Padre Eterno para el perdón de todos nuestros pecados. Empecemos por meditar en el cuerpo, está lleno de heridas, son espejos donde nos miramos y vemos toda nuestra maldad, nuestros pecados y entendemos que somos culpables de haberle crucificado. Recibimos también su alma. Y que es el alma? El alma es la vida. Dios nos da la vida a través de la animación del cuerpo. Lo que anima la vida de un cuerpo es el alma. Por eso el animal tiene alma animal. Por eso la planta tiene alma vegetal, porque tiene vida. PERO NO TIENEN ESPÍRITU. Los perros no tienen espíritu, las plantas no tienen espíritu. EL ESPÍRITU ES LA PARTE DIVINA QUE CADA HOMBRE TIENE EN SI, que Dios sopla al hombre en el momento que el hombre concibe con la mujer. El espíritu es la parte divina que tiene cada hombre y se expresa en la vida del hombre a través de la conducta. Entonces el alma del hombre tiene espíritu lo mismo que el alma de Jesús, pero el Espíritu de Jesús es la plenitud de su divinidad, algo que en nosotros es apenas una chispita. El cuerpo de Jesús en la Eucaristía está vivo, su sangre es vida y está viva, pues ese cuerpo y esa sangre están animados por su alma, y su alma está llena de su divinidad. Comemos de su cuerpo y de su sangre viva y llena de vida para nuestras almas. Dijo el Señor, Tu crees Tomás porque ves, dichosos aquellos que creen sin ver. Pero para la gloria de Dios, el Señor nos ha dado milagros eucarísticos a través de los siglos que dan testimonio de la Presencia real y viva de Jesús, Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad. Milagro Eucarístico de Lanciano En la población de Lanciano, pequeña ciudad medieval de los Abruzos, en Italia, en la provincia de Chieti, se conserva desde hace más de doce siglos el primero y más grande de los milagros Eucarísticos: el Milagro Eucarístico de Lanciano. En el siglo VIII, un monje basiliano empezó a dudar de la presencia real del Cuerpo y de la Sangre de Jesucristo en la hostia y en el cáliz con el vino consagrado; durante la consagración del pan y del vino ocurrió el milagro. Ante los ojos del sacerdote; la hostia se convirtió en un pedazo de carne viva; el vino consagrado dentro del cáliz se transformó en sangre viva, coagulándose en cinco piedrecitas irregulares de forma y tamaño diferentes. Esta carne y esta sangre se han conservado con el paso de los siglos en el mismo estado original. Verificaciones científicas del milagro En la década de 1970, tomando ventaja de los adelantos de la ciencia se llevó a cabo el análisis científico de aquellas reliquias antiguas por medio de un grupo de expertos en patología y cardiología. Los profesores Odoardo Linolli, catedrático de Anatomía, Histología Patológica , Química y Microscopia clínica, y Ruggero Bertellí, de la Universidad de Siena hicieron las pruebas pertinentes de laboratorio. Estos fueron los resultados: La carne es verdaderamente carne. La sangre es verdaderamente sangre. Ambos son sangre y carne humanas. La carne y la sangre son del mismo grupo sanguíneo (AB). La carne y la sangre pertenecen a una persona VIVA. El diagrama de esta sangre corresponde al de una sangre humana que fue extraída de un cuerpo humano ese mismo día. La carne está constituida por un tejido muscular del corazón (miocardio). La conservación de estas reliquias dejadas en estado natural durante siglos y expuestas a la acción de agentes físicos, atmosféricos y biológicos, es un fenómeno extraordinario. Es también digno de admiración el hecho de que a pesar de que las piedrecitas de sangre están coaguladas, y aunque todas son de tamaño diferente, se encuentra que cada una pesa igual que todas cinco unidas a la vez. La conclusión de la ciencia ratifíca nuestra fe y aquí queda demostrada la autenticidad de este milagro eucarístico de Lanciano. Milagro Eucarístico en Buenos Aires El Doctor Castañón fue llamado a Buenos aires por el Cardenal Jorge Mario Bergoglio, quien ahora es el actual Papa Francisco, le pidió que investigara dos hostias que sangraban una de ellas en Buenos Aires y la otra en Chilpancingo. Esto sucedió debido a esta costumbre de nuestros tiempos de recibir la hostia en la mano, pues esa hostia cayó al suelo y aunque estaba consagrada y es el cuerpo y la sangre de Cristo, no la quiso recoger y recibir. El Sacerdote la recogió y la depositó en agua para que se disolviera pues es una norma de la Iglesia, pues después de desintegrarse totalmente la echan en una planta. A los cinco días después de haberla dejado en el tabernáculo ve que en vez de haberse desintegrado, la hostia presentaba unas manchas rojizas, la intensidad de la sangre aumentó al igual que el líquido, por esto fue invitado el Doctor Ricardo Castañon para analizar estas muestras en un laboratorio. Toma una muestra de una masa gelatinosa y también toma muestra de la otra hostia de Chilpancingo en 1996 de sangre que se ha secado y se ha vuelto costra. Viajó a California Estados Unidos para analizar las muestras en un laboratorio, no les explica el origen. El resultado es que la muestra consiste en músculo del corazón, músculo del miocardio del ventrículo izquierdo, ese fue el primer resultado. Después de 1999 se hicieron más pruebas a través de un gran experto en cardiología, patología y bioquímica, se trata del profesor Frederick Zugive que ha escrito un libro sobre como pronosticar de que ha muerto una persona cuando el corazón ha sido lesionado. El nos dijo, "esta persona que tuvo este corazón tiene que haber muerto muy maltratada porque en su corazón hay lesiones que muestran que ha sido muy golpeado, a este hombre lo han torturado. Luego dice hay algo que ustedes me tienen que explicar. Como es posible que cuando yo estaba estudiando esta muestra, las células palpitaba y latían? Así que explíquenme como le sacan el corazón vivo a una persona y me lo traen a mi laboratorio en Nueva York". Se le respondió que no era lo que el pensaba, pues esta era una hostia consagrada que había empezado a sangrar. Fue algo extraordinario para el y para nosotros dice, pues esta muestra estaba siendo analizada durante los últimos cinco años." Después de esto el doctor viaja de regreso a Argentina, buscando en los análisis iniciales una laboratorista dice: Se observan unos líquidos, glóbulos rojos, glóbulos blancos, hemoglobina, pero lo que mas le llama la atención es que las células están vivas, palpitando y latiendo. Lo raro es que ya había pasado varios días y se sabe que a los 15 minutos los glóbulos blancos y rojos se descomponen.
La Presencia Real. Cuerpo, Sangre, Alma y DivinidadHabla el Señor:Hijo mío: Mi presencia en la Sagrada Eucaristía es tan real como mi presencia durante mi vida mortal. Yo soy el Señor tu Dios, nada es demasiado maravilloso para mí, pues estoy en todas partes en tiempo y en eternidad. Usando mi omnipotencia, hice este milagro en mi omnipresencia, el más grande de todos los milagros antes de mi resurrección, hice que mi cuerpo, sangre, alma y divinidad fueran creados en las especies consagradas del pan y del vino. En la última cena pasé mi dignidad como Sumo Sacerdote de la orden de Melquisedec a todos los sacerdotes consagrados en mi Iglesia a través de la sucesión de Pedro. Yo soy el pan de la vida que ha tomado forma en las simples especies del pan como mi cuerpo, y en las especies del vino como mi sangre, la Sagrada Eucaristía es mi verdadera presencia: "Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad". Durante la Eucaristía se mezcla mi cuerpo con mi sangre para dar mi vida, mi alma y mi espíritu a todos los que me reciben con un corazón limpio. Mi pan es verdadera comida para tu alma, mi sangre es verdadera bebida y fuente de gracia para tu alma y tu espíritu. Yo soy el cordero de Dios, inmolado por los pecados del mundo, nadie puede tener vida eterna si no come de mi cuerpo y bebe de mi sangre.
Notas: La Presencia Real. Cuerpo, Sangre, Alma y DivinidadAutor: José de Jesús y María Por favor comparte en las redes sociales, tu voto es una gran forma de evangelizar: |