Terrorismo
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Entendemos que el Terrorismo es una manera de inducir el terror para coaccionar o
controlar los resultados de una causa. Recientemente hemos visto una nueva ola de venganza
terrorista que se ha vuelto guerra en contra de la democracia y la libertad.
La situación que confrontamos ahora, es como luchar contra ese terrorismo sin generar mas
miedo y sin destruir vidas inocentes.
El asunto consiste en no volverse como el terrorista, quien actúa empujado por el odio y
la venganza, sino en actuar racionalmente y responsablemente.
El comienzo de una actividad terrorista empieza cuando una persona o grupo es ofendida por
algo que es interpretado como una injusticia o como una ofensa. Los terroristas deciden
arreglar la situación por medio de una ofensiva de cualquier clase, pero esto resulta
convertirse en el comienzo de un problema mas grande, puesto que al forzar ideales con
acciones irresponsables, ellos pierden todo el respeto por su causa.
Ya sea que la ofensa es justa o injusta, de ninguna manera justifica la venganza, puesto
que Dios nos ha enseñado a perdonar, de otra manera no seremos perdonados.
El terrorismo fue introducido al mundo en el paraíso, cuando Caín mató a Abel, porque
su odio no tuvo control. El terrorismo ha estado con nosotros desde entonces y no parará
hasta que escuchemos y vivamos las palabras de Cristo.
El terrorismo puede tomar varias formas, así que tenemos el caso de la política que
afecta adversamente las vidas de mucha gente por medio de métodos legales. Vemos como
algunas naciones se aprovechan de otras naciones y las controlan con medidas económicas,
vemos como la sobre protección de algunos se sufre por contraste en la falta de
protección y el mal futuro económico de otros, los ricos siempre se hacen mas ricos
mientras que los pobres se vuelven mas pobres; el balance de la justicia no se mantiene.
El mundo busca paz, pero el buen sentido nos dirá que no hay verdadera paz si un grupo
pequeño está contento y próspero mientras que el grupo grande es pobre, sin techo,
oprimido y con hambre.
Las semillas del desagrado y del odio se están multiplicando, son fertilizadas con la
venganza que tarde que temprano engendra el terrorismo.
Cuando aprenderemos?
El odio no puede ser destruido con mas odio, la violencia no se elimina con mas violencia,
el terrorismo no se puede parar con mas terrorismo. Al hacer esto, le damos vuelta a la
rueda del odio hasta que nos enfrentamos con la inesperada retribución por nuestras
acciones irresponsables.
La venganza es un método absurdo de ponerse en paz, que nunca resolverá ningún
problema, es una continuación del viejo adagio: ojo por ojo, diente por diente.
Jesús nos enseñó muy claramente su doctrina de salvación que consiste en perdonar a
los que nos hacen daño cuando dijo:
Mateo 5:38
38 «Habéis oído que se dijo: = Ojo por ojo y diente por diente. =
39 Pues yo os digo: no resistáis al mal; antes bien, al que te abofetee
en la mejilla derecha ofrécele también la otra:
40 al que quiera pleitear contigo para quitarte la túnica déjale
también el manto;
41 y al que te obligue a andar una milla vete con él dos.
42 A quien te pida da, y al que desee que le prestes algo no le vuelvas
la espalda.
43 «Habéis oído que se dijo: = Amarás a tu prójimo = y odiarás a
tu enemigo.
44 Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os
persigan,
45 para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su
sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos.
46 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa vais a tener?
¿No hacen eso mismo también los publicanos?
47 Y si no saludáis más que a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de
particular? ¿No hacen eso mismo también los gentiles?
Lo que se ha vuelto muy claro con respecto al terrorismo, es que caen víctimas inocentes,
que esos asesinos desalmados siempre creen que están haciendo todo correcto.
Que tan ciegos podemos estar?
La regla dorada o la ley de los Profetas dice "No hagas con los demás lo que no
quieres hagan contigo"
Ahora, si cada uno de nosotros ha cometido actos de maldad en contra de nuestro prójimo y
después nos enojamos cuando ellos se desquitan, es porque estamos muy ciegos para ver la
maldad dentro de nosotros y siempre justificamos lo que hacemos mal tal como Jesús nos
explica:
Mateo 7:3
3 ¿Cómo es que miras la brizna que hay en el ojo de tu hermano, y no
reparas en la viga que hay en tu ojo?
4 ¿O cómo vas a decir a tu hermano: "Deja que te saque la brizna
del ojo", teniendo la viga en el tuyo?
5 Hipócrita, saca primero la viga de tu ojo, y entonces podrás ver
para sacar la brizna del ojo de tu hermano.
Terrorismo y Religión
El significado de la palabra Religión es unión con Dios, una unión que solo puede
ocurrir cuando obedecemos los mandamientos de Dios.
El quinto mandamiento dice muy claramente: No matarás.
Matar en el nombre de una Religión no viene de Dios, es un pecado que traerá la venganza
de Dios.
Todas las religiones son buenas porque le ayudan a la gente espiritualmente a encontrar la
verdad. Jesús es la Verdad, el Camino y la Vida.
Las enseñanzas de nuestro Señor nos guían a encontrar la verdadera paz y el significado
de la vida.
Errar es humano, perdonar es divino. El Señor dice: "Perdonad y seréis
perdonados". Nosotros rezamos en el Padre Nuestro, "Perdona nuestras ofensas
así como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden".
El hecho de que algunos terroristas se identifiquen con una religión, no nos da el
derecho de juzgar a toda la gente que está en esa religión.
No podemos hacerle juicio a nadie, puesto que el Señor dice (Mateo 7:2) No juzguéis y no
seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados.
Otras escrituras:
Mateo 26:52 porque todos los que empuñen espada, a espada perecerán.
Romanos 12:19
No tomando la justicia por cuenta vuestra, queridos míos, dejad lugar a la Cólera, pues
dice la Escritura: = Mía es la venganza: yo daré el pago merecido, = dice el Señor.
1 Tesalonicenses
Mirád que nadie devuelva a otro mal por mal, antes bien, procurád siempre el bien mutuo
y el de todos.
1 Pedro 3:9
No devolváis mal por mal, ni insulto por insulto; por el contrario, bendecíd, pues
habéis sido llamados a heredar la bendición.
Terrorismo de una clase muy cruel
Hay una fuente de terror en cada uno de nosotros. Infligimos terror sobre los demás
cuando interferimos con sus derechos, dignidad y respeto.
Cada vez que pecamos, pecamos ya sea en contra de Dios al no obedecer los primeros tres
mandamientos o pecamos en contra del prójimo al desobedecer el resto de los mandamientos
de amor a nuestros hermanos. Este es un acto de terror que cometemos en contra de los
demás, esto es, si admitimos el verdadero sentido del terror.
Mucha gente es afectada por el vandalismo, el ruido, la polución, los vicios y otras
amenazas irresponsables que encontramos en nuestra sociedad. Hacemos la maldad y tratamos
de hacernos los desentendidos. Cometemos el pecado y permanecemos silenciosos, no nos
arrepentimos porque nos burlamos de Dios, creyendo que El es ciego y no nos ve o que es
indiferente al pecado.
Sangre inocente derramada por
toda la tierra
Cada año, al rededor de cincuenta millones (50'000.000) de bebes inocentes son asesinados
en el mundo a través del aborto.
La vida es una sola desde el vientre hasta la tumba. La sangre de esos inocentes clama por
la venganza de Dios.
Esta clase de terror silencioso es infligido sobre la vida inocente en su mismo comienzo y
no mucha gente se opone a este crimen para pararlo. Antes por el contrario, mas vida
inocente se destruye ahora que la mayoría de los países (civilizados) permiten el uso de
anticonceptivos, los cuales son un método antinaural de control de la natalidad, la
manipulación de la vida a través de exploración científica de las células somáticas,
los embriones humanos, la clonación y otros métodos barbáricos de jugar con la vida
humana.
Ya hemos encontrado los verdaderos terroristas, no busquemos mas ........
Que nos estamos haciendo a nosotros mismos?
Nosotros somos el enemigo de la vida y nadie esta tomando venganza ....
Ninguno sino Dios solamente, tal como lo ha prometido en las Sagradas Escrituras.
Salmo 106:39-42
36 Sirvieron a sus ídolos que fueron un lazo para ellos;
37 sacrificaban sus hijos y sus hijas a demonios.
38 Sangre inocente derramaban, la sangre de sus hijos y sus hijas, que
inmolaban a los ídolos de Canán, y fue el país profanado de sangre.
39 Así se manchaban con sus obras, y se prostituían con sus
prácticas.
40 Entonces se inflamó la cólera de Yahveh
contra su pueblo, y abominó de su heredad.
41 Los entregó en mano de las gentes, y los dominaron los que los
odiaban;
42 sus enemigos los tiranizaron, bajo su mano quedaron humillados.
Injusticia
Nos damos cuenta con disgusto de la lista de multibillonarios del mundo, los cuales viven
vidas de lujo y de placer mientras en contraste millones de personas están muriéndose de
hambre por todo el mundo.
Es la misma historia del hombre rico del Evangelio y de Lázaro. (Lucas 16:19)
Después de su muerte el hombre rico fue castigado en llamas por sus lujos y falta de
caridad, mientras Lázaro disfrutó de la vida del Paraíso.
Muchas naciones están unidas ahora, tratando de pelear contra el terrorismo, lo cual es
una idea muy buena, pero cuanto mejor sería si esta gran coalición sin precedencia
canalizara sus esfuerzos para parar la pobreza y la injusticia del mundo.
Venganza de Dios
Jeremías 5:28-29
28 engordaron, se alustraron. Ejecutaban malas acciones. La causa del
huérfano no juzgaban y el derecho de los pobres no sentenciaban.
29 ¿Y de esto no pediré cuentas? - oráculo de Yahveh -,¿de una
nación así no se vengará mi alma?
Solución al terrorismo
Recemos por Justicia en el mundo.
Recemos para que los pobres tengan comida y techo.
Recemos para que los malvados se arrepienten.
Recemos por los que están planeando venganza para que dejen sus planes de terror.
Recemos para que nuestros enemigos reciban las bendiciones de Dios.
Recemos para que nuestros líderes sean guiados por el Espíritu Santo, así que nuestras
naciones sean respetadas como naciones que cumplen la Ley de Dios, y hacen su voluntad.
Recemos para que las autoridades no abusen del poder.
Perdonemos con humildad las ofensas que nos han hecho.
Recémosle a Dios: "Perdona nuestros pecados como nosotros también perdonamos a los
que nos ofenden."
Encomendémonos nuestras necesidades al Inmaculado Corazón de María nuestra Madre llena
de compasión, para que ella interceda por nosotros.
Seamos amables los unos a los otros.
Vivamos las palabras de Jesús: Ama a tus enemigos.
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