Después del grupo de oración
Por varios minutos me fue dado el dolor del Sagrado Corazón de Jesús, es un dolor de agonía, un dolor que parece llevar a la muerte, es muy fuerte en verdad, Yo lo he sentido en otras ocasiones. Durante este tiempo recibí estas palabras del Señor. Jesús:
Yo soy el hombre de dolores, mi Sagrado Corazón es todavía una herida abierta sangrando con pena. Mi alma está llena de pena hasta la muerte, si, hasta la muerte de cada alma que escoge la maldad y rechaza mi amor.
La gente todavía no ha escuchado mi mensaje de arrepentimiento, prefrieren mejor acariciar su culpa que venir a mí amor para ser perdonados.
Yo he puesto ante ellos la vida y la muerte, pero la mayoría escoge la muerte, no conocen el significado de la muerte eterna, que es la separación del alma de mi amor, pues mira, el alma no puede vivir sin amor, este sufrimiento es más allá de tu entendimiento.
Me causa gran dolor en el corazón el ver tanta obstinación y rechazo a mi llamado.
Solamente unos pocos consuelan mi corazón siendo fieles y viniendo a mí con humildad.
¿Puedes consolar mi corazón al rezar por todos tus hermanos y hermanas, haciendo reparación con amor y acercando más a mí?
Sana mis heridas con la medicina del amor. Ama a Dios y ama a tu prójimo.
Solamente unos pocos consuelan mi corazón siendo fieles y viniendo a mí con humildad.
¿Puedes consolar mi corazón al rezar por todos tus hermanos y hermanas, haciendo reparación con amor y acercando más a mí?
Sana mis heridas con la medicina del amor. Ama a Dios y ama a tu prójimo.
Mensajes de Jesús, María y Dios el Padre. |
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10/20/1995
El hombre de dolores