Ante el Santísimo Sacramento durante un cenáculo en la Iglesia del convento del Sagrado Corazón en Kensington, Sydney Australia.
Yo dije, Bendita Virgen María, perdóname todos los pecados que Yo he cometido contra tu Hijo Jesús. La Santísima Virgen María:
Yo soy la madre misericordiosa, Yo perdono las ofensas que ustedes han cometido en contra de mi hijo.
Si, yo soy una madre llena de misericordia, porque cada uno de ustedes me ha costado una gran cantidad de lágrimas. Yo estoy preparada a derramar lágrimas aun de sangre para traerles a la conversión.
Mi corazón está lleno de pena al mirar tanto pecado e iniquidad, por esta razón Yo soy el refugio de los pecadores, porque cada uno es mi hijo engendrado al pie de la cruz y Yo estoy preparada a enseñarle a cada uno a regresar al Señor.
Las tentaciones son presentadas por el demonio principalmente a través de los ojos, que son grandes ventanas al mundo, y el alma es contaminada con tantas imágenes grotescas que le son presentadas.
Por esta razón Yo te pido que evites mirar mas de la cuenta cualquier cosa que pueda iniciar deseos en tu mente, porque si lo haces, el malvado habrá triunfado en elevarte a las pasiones carnales o mundanas, y entonces caerás en el pecado rápidamente con tu mente.
Pelea la buena batalla en contra de la tentación ayunando con tus sentidos, de esta forma puedes ocupar tu mente en pensamientos mas sublimes.
Mensajes de Jesús, María
y Dios el Padre. |
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1/20/1996
Tu madre misericordiosa