Navidad, Nacimiento de Jesús, Navidad vivida en espíritu y en verdad
Navidad, Nacimiento de Jesús, Navidad vivida en espíritu y en verdad
Significado espiritual del Nacimiento de Jesús La Palabra de Dios, o sea el mismo espíritu de la Segunda persona de la Santísima Trinidad, el Verbo Eterno; (Juan 1:14) descendió de los cielos al vientre de la Santísima Virgen María (Lucas 1:35), para iniciar su trabajo de la Redención de toda la humanidad.
Era necesario que Dios mismo en la persona del Hijo, Dios y hombre, pagara por los pecados de toda la humanidad, lo cual realizó con su muerte en la cruz.
Dios nace en María primero, se encarna en ella (Lucas 1:35), o sea que sucede la unión hipostática de Dios con el hombre. Luego Jesús con su muerte en la cruz se constituye en el Nuevo Adán y declara a la Santísima Virgen María la Nueva Eva, cuando la nombre madre de todos los Hijos de Dios en la Gracia, (Juan 19:27) primero en la persona de Juan el Apóstol amado a quien le dice “Ahí está tu madre”.
Juan 1:11-12 La palabra de Dios (Jesús) vino a los suyos, y los suyos no la recibieron. Pero a todos los que la recibieron les dio poder de hacerse hijos de Dios, a los que creen en su nombre.
El poder de ser hijos de Dios lo tenemos en nuestra fe en Cristo. Como hijos de Dios, pueblo escogido en la Gracia, tenemos el privilegio de recibir a Jesús en nuestro corazón a través de la Sagrada Eucaristía.
Cuando le recibimos estamos recibiendo la Palabra, o sea el Espíritu de Dios, también estamos recibiendo el Cuerpo y la Sangre de Cristo, verdadero Dios y verdadero hombre, nuestro Salvador.
Aceptar a Cristo es nacer de nuevo de lo alto (Juan 3:3), vivir en Cristo es volvernos portadores de la Palabra que es el Espíritu, y portadores de su cuerpo y su sangre que nos limpia del pecado.
Durante la Santa Misa ocurre un nacimiento espiritual de Cristo en el altar a través de las manos del Sacerdote. Cristo en su Omnipresencia trasciende el tiempo, la materia y el espacio, se hace presente en el altar cuando es levantado y se convierte en comida para nuestras almas. (Marcos 14:22-24) Cuando le recibimos, Cristo nace de nuevo en nosotros, así que el nacimiento de Jesús se repite en cada corazón en el Sacramento de la Sagrada Eucaristía.
¿Y como nace el Señor? Así como él nació en medio del desprecio de una gente que no le abrieron las puertas a la Virgen María y a San José cuando buscaban posada, (Lucas 2:7) así también Cristo viene al corazón de aquellos que le aceptan en su forma sacramental y le ofrecen su vida como morada. Siendo Rey merecería un lugar muy opulento, lleno de esplendor, pero el Reinado de Cristo es de una forma humilde, él viene a los pequeños que tienen un corazón contrito y humillado.
Por eso Él entra a la frialdad de nuestro corazón, nació en una cueva, un pesebre frío, un lugar fuera de la ciudad, un lugar pobre. Nuestro corazón es como un lugar muy secreto, una cueva donde entra a vivir el Señor del Universo, un lugar frío por causa de nuestra indiferencia, pues no le damos la calurosa bienvenida que Él se merece y nos olvidamos de su Presencia. Cuando nuestro corazón es un lugar apartado del mundo, nos encontramos a solas con Jesús, lejos del mundo. El corazón es un lugar pobre cuando se desprende de todo los apegamientos de este mundo para que en esa pobreza le podamos recibir nuestro Rey.
Es un lugar donde él entra a reinar como Rey de Reyes, Señor de Señores y así como en el pesebre, allí también se encuentra la Santísima Virgen María donde ella también reina en nuestras vidas. Pues esa unión de Cristo con nosotros nos lleva a aceptar este nuevo Adán y esta nueva Eva, nuestros padres en la Gracia, así se forma en nosotros el Reino de los Cielos, el Reino de la Divina Voluntad.
La Gracia Santificante de los Sacramentos nos da la fe, la esperanza y el amor que nos mantiene la Presencia de Cristo en nuestras vidas.
Y llenos de Cristo podremos algún día decir como San Pablo, no soy yo quien vive, es Cristo que vive en mí.
Si Cristo vive en mí, lo cual es cierto cuando yo lo acepto y también lo recibo sacramentalmente, yo también tengo que hacer lo mismo que hizo María, tengo que dar a luz a Cristo, pues teniéndolo dentro es como estar embarazados con su Presencia y Cristo debe nacer de nosotros para los demás.
Cuando nos llenamos de su Luz y la brillamos a los demás (Mateo 5:14) en nuestras buenas obras, nosotros estamos haciendo que Cristo nazca de nuevo ante los demás como la luz del mundo.
Entonces el nacimiento de Jesús no solamente se refiere a ese evento de hace más de dos mil años, Jesús en forma espiritual debe nacer vivir y reinar en cada corazón.
Promesa y nacimiento de Jesús el Salvador La humanidad había ofendido a Dios hasta el punto de necesitar ser rescatada del castigo eterno causado por el pecado. Todo comenzó con Adán y Eva nuestros primeros padres, quienes ofendieron a Dios pero recibieron la promesa de la Salvación.
En el Libro de Génesis [Génesis 3:15], el proto evangelio nos dice que Dios le predijo a la serpiente [el demonio] con ser aplastado por la Mujer [la Virgen María] cuyo talón seria maltratado [Nuestro Señor con su pasión y muerte].
Dios predijo la enemistad entre la Mujer y el demonio. Entre ella y su descendencia o sea María, su Hijo Jesús y todos sus nuevos hijos [los hijos de Dios en la Gracia] y la serpiente con todos sus hijos, o sea el demonio y todos los que rechazan a Dios y se vuelven sus hijos.
[Apocalipsis 12:17] Se enfureció el dragón contra la mujer, y fuese a hacer la guerra contra el resto de su descendencia, contra los que guardan los preceptos de Dios y tienen el testimonio de Jesús.
En otras palabras Dios prometió enviar una mujer cuyo hijo sería Nuestro Salvador porque por su muerte El vencería el demonio. [Génesis 3:15]
El Señor le dijo a Moisés, [Deuteronomio 18:15-18-19]
15 Yahvé tu Dios suscitará, de en medio de ti, entre tus hermanos, un profeta como yo, a quien escucharéis.
18 Yo les suscitaré, de en medio de sus hermanos, un profeta semejante a ti, pondré mis palabras en su boca, y él les dirá todo lo que yo le mande.
19 Si alguno no escucha mis palabras, las que ese profeta pronuncie en mi nombre, yo mismo le pediré cuentas de ello.
O sea que si alguien rechaza al Señor, será cortado por esto del resto de la gente de Dios. Otros profetas recibieron el mensaje de la Venida del Mesías, quien liberaría la gente de Dios de la esclavitud de otras naciones.
A través del profeta Miqueas, [Miqueas 5:2-5] fue revelado que Jesús nacería en Belén, que El sería un Rey poderoso y también un pastor, que traería paz a las naciones.
Pues bien, el Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una doncella está encinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel. [Isaías 7:14]
Esta doncella es la Virgen María quien concibió por obra y gracia del Espíritu Santo a su hijo Jesús quien es Emmanuel que quiere decir "Dios con nosotros".
Porque una criatura nos ha nacido, un hijo se nos ha dado. Estará el señorío sobre su hombro, y se llamará su nombre «Maravilla de Consejero», «Dios Fuerte», «Padre Eterno», «Príncipe de Paz». [Isaías 9:5]
La razón de su venida En el principio existía Palabra y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios. [Juan 1:1]
Y la Palabra se hizo carne, y puso su Morada entre nosotros, y hemos contemplado su gloria, gloria que recibe del Padre como Hijo único, lleno de gracia y de verdad. [Juan 1:14]
Jesús vino a restaurar nuestras almas a la inmortalidad que perdimos en el Paraíso a través del pecado de nuestros primeros padres. Durante su Ministerio El sanó a los enfermos para poder probar que El tenía el poder de perdonar los pecados y también para mostrarnos su Amor Misericordioso. También vino a enseñarnos la Sabiduría de Dios, el Camino de la Salvación, la Imitación de su vida y a que le sigamos.
[Isaías 53:11] Por las fatigas de su alma, verá luz, se saciará [ 1]. Por su conocimiento justificará mi Siervo a muchos [ 2] y las culpas de ellos él soportará [ 3].
Examinemos este pasaje bíblico que resume el trabajo de Nuestro Señor Jesucristo:
1 Por las fatigas de su alma, verá luz, se saciará:
El trabajo de nuestra Redención envolvía la muerte de Jesús en la cruz. El tenía que satisfacer la Justicia Divina dando su vida a cambio de nuestras vidas. Así que por causa de los méritos de su santo sacrificio, por sus llagas somos sanados de las heridas de nuestros pecados. El pudo ver el resultado de su misión cuando dijo en el último momento "Todo esta terminado"
2 Por su conocimiento justificará mi Siervo a muchos:
Jesús es la Palabra de Dios que se hizo carne, El es la segunda persona de la Santísima Trinidad. Es la Sabiduría de Dios que vino a compartirse con nosotros volviéndose el Camino al Padre. Los Evangelios son las enseñanzas de Cristo y nos conducen a la Salvación. Somos justificados creyendo en Jesucristo, en efecto este es el Trabajo de Dios: que creamos en quien Dios ha enviado, Su Hijo Nuestro Señor Jesucristo [Juan 6:29]
3 Y las culpas de ellos él soportará
Por su pasión, agonía y muerte, Jesús sufrió por nuestros pecados. Recibió sobre si mismo el castigo debido por nuestras faltas porque "El es el Amor del Dios hecho hombre", quien nos ama en una forma tan misericordiosa que es imposible entender. Por sus santas llagas somos sanados [Leer Isaías Capitulo 53]
Jesús vino para ser el Buen Pastor según la predicción hecha por el Señor Yahvé: Yo mismo seré el Pastor de mis ovejas [Ezequiel 34:15] ;
Jesús dice: Yo soy el Buen Pastor [Juan 10:11-14]
[Filipenses 2.10-11] 10 Para que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en los cielos, en la tierra y en los abismos,
11 y toda lengua confiese que Cristo Jesús es Señor para gloria de Dios Padre.
Como fue el Nacimiento de Jesús -
[Lucas 1:26-56 Lucas 2:1-21] En resumen la Virgen María recibió la visitación del Arcángel Gabriel quien le dijo:
Dios te salve María llena eres de Gracia [que quiere decir llena del favor de Dios], el Señor esta contigo, bendita tu eres entre todas las mujeres. Concebirás un hijo quien será grandioso, será llamado el Hijo del Altísimo y el Señor le dará el Trono de su Padre David. Luego el ángel le explico a María puesto que ella era virgen: El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios. María dijo hágase en mí según su palabra, y así se convirtió en la Madre de Dios.
La Virgen María estaba prometida a un hombre llamado José, pero antes de que se casaran ella estaba embarazada. José quiso divorciarse de ella en silencio para evitar publicidad innecesaria pero un ángel vino en sus sueños y le reveló que su hijo había sido concebido por el poder del Espíritu Santo y su nombre sería Jesús, el Salvador de la Humanidad.
El bebé nació en una noche estrellada, los ángeles vinieron al mundo y se regocijaron de su nacimiento cantando Gloria a Dios en las alturas y en la tierra Paz a los hombres de buena voluntad. Ellos dirigieron algunos pastores al sitio del Nacimiento del Niño Dios.
Tres Reyes Magos vinieron del oriente para darle homenaje a Nuestro Salvador, ellos fueron guiados por una estrella.
El Salvador del mundo nació en un pesebre, una cueva oscura porque sus pobres padres no pudieron encontrar un lugar donde pasar la noche, todas las puertas le fueron cerradas a la madre a punto de dar a luz y a su hijo. Cuando nació el Señor, fue envuelto en pañales y puesto en el pesebre, rodeado de un buey y un burro que con su aliento le daban calor.
Su venida no fue bienvenida, excepto por los pobres y los humildes. Nuestro humilde Salvador fue desconocido por el mundo hasta que empezó a hacer milagros, esto causó que los aprendidos fariseos y los sacerdotes de su tiempo se llenaran de celos y más tarde lo condenaran a morir en la cruz por haber implicado que El era el Hijo de Dios.
Como deberíamos celebrar la Navidad Hace dos mil años que nació el Salvador del mundo. Su venida fue un evento histórico de tal magnitud que el mundo moderno inició su calendario el año de su nacimiento.
Este fue un evento muy importante porque ningún hombre como el había existido, lleno de Poder, Sabiduría y Amor, sino porque El era el Hijo de Dios, el Mesías esperado, el Redentor, el Ungido de Dios.
Su venida al mundo atrajo seguidores quienes son aquellos destinados a ser salvados. Para los humildes, los pobres y los marginalizados, Jesús es el hombre!
Gentes de todos los caminos de la vida son invitadas a seguir a Jesús en su camino a nuestra casa celestial.
Cuando recordamos la venida de Nuestro Señor en la estación de Adviento o Navidad, estamos celebrando nuestra liberación de la esclavitud del pecado, puesto que Jesús es Nuestro Salvador. También celebramos su futura venida en Gloria como El lo ha prometido.
El día de Navidad es el día del cumpleaños de Nuestro Señor Jesucristo, un día para alabar a Dios por haber amado tanto al mundo que le dio su Único Hijo engendrado para que todo el que crea en El sea salvado [Juan 3:16]
El día de Navidad es realmente un "día santo, un festival religioso", desafortunadamente el mundo lo ha reemplazado por un día de fiesta del mundo
La palabra Navidad en Inglés [Christmas] que tiene dos partes, Cristo y mas ha sido reemplazada por la palabra Xmas, o sea que retira el nombre de Cristo, no honramos su nombre en la Navidad, pues lo hemos extraído de la palabra. Y así también Cristo se ha borrado en muchas otras formas.
Deberíamos de recolectarnos especialmente durante los días de Navidad y celebrar el regalo que hemos recibido agradeciéndole a Dios por el regalo de Su Hijo, amándonos los unos a los otros y compartiendo nuestra caridad con los demás.
Otro punto que tenemos que aclarar es que Santa Claus o San Nicolás no son el evento principal de la Navidad, este día santo ha sido reemplazado por una oportunidad para vender, este tiempo santo ha sido comercializado y usa a Santa Claus para distribuir regalos olvidándose en muchos casos del Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo. "Pongamos cuidado" Cristo viene pronto.
Algunos podrían insistir que está muy tarde para cambiar la tradición, puede ser. Pero, para donde va este mundo? Estamos olvidándonos de dar a Dios lo que es de Dios porque estamos tan contentos haciendo cosas para nosotros.
Mucha gente por todo el mundo se ha olvidado del verdadero significado de la Navidad por causa de nuevas tradiciones. El Nacimiento de Cristo ha sido reemplazado por la Nueva Navidad [Xmas], una celebración pagana que no tiene que ver nada con el Señor.
Incluyamos a Jesús en nuestras vidas en esta Navidad y descubramos para que hemos sido creados. Démosle gracias a Dios por haber enviado a su Hijo a salvarnos, celebremos no solamente su Nacimiento sino también su muerte la cual nos salva verdaderamente de la muerte del pecado. Meditemos la venida del Salvador del mundo y vivamos para siempre.
Hagamos cada día de nuestras vidas una verdadera Navidad donde Jesús nace no en una cueva fría de Belén sino en nuestro corazón. Démosle la bienvenida y amémosle con todo nuestro corazón, con toda nuestra mente y con toda nuestra fortaleza.
Y para disfrutar más este tiempo tan hermoso de cada año, hagamos la Novena de Aguinaldos al Niño Jesús.
Dejemos que Cristo nazca de nuevo en nuestra vida y nazcamos de nuevo a la vida eterna.
Jesús te ama.
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