Apostasía - No fe en la Iglesia Católica - que pasa?
¿Que pasó con la fe Católica? - ¿Donde está la fe Católica? - Se acabó la fe Católica!
Que es lo que le está sucediendo a la Iglesia Católica? Pidamos el espíritu Santo para no ser engañados.
Gracias a Dios por todos los Sacerdotes santos que están sufriendo y no están de acuerdo con todas las profanaciones y barbaridades que están sucediendo en la Iglesia, gracias a Dios por el pequeño remanente fiel, Cristo está con nosotros.
Evidentemente la Iglesia está perdiendo la fe. ¿Y como podríamos describir la verdadera fe?
La fe que nos enseñaron nuestros padres, la fe de los Padres de la Iglesia, la fe del Magisterio fiel.
Una fe que tenía respeto por todo lo santo, una fe que se hacía respetar y mantenía autoridad, una fe que de seguro nos llevaba por el camino verdadero de Cristo hasta el fin de los tiempos.
Pero que pasó con el Concilio Vaticano Segundo 1962-1965? Este Concilio inició un proceso de Ecumenismo que desfiguró el rostro de la Iglesia tradicional y creó muchos errores, a la vez que abrió la puerta al modernismo, y a la apostasía, o sea la falta de fe.
Según algunos sectores tradicionalistas de la Iglesia, como la hermandad de San Pío X, el Concilio Vaticano Segundo está lleno de errores y contiene puntos que deben ser condenados porque contradicen abiertamente la tradición, el magisterio papal y los anteriores concilios de la Iglesia.
Después del Vaticano Segundo la Iglesia ha sido profanada poco a poco y está siendo destruida, hemos visto la modernización de los templos que ha retirado imágenes, a cambio han introducido expresiones artísticas grotescas de Jesús, María y los santos. Han quitado el Santísimo del centro de las Iglesias, lo han colocado en un sitio donde ya no es el más importante, lo han quitado del medio, han retirado confesionarios, han removido arrodilladeros, en algunos templos han quitado el altar de su lugar para colocarlo de manera como si la Iglesia fuera un auditorio.
Han introducido música rock, bailes y cantos protestantes que le han quitado la solemnidad a la Santa Misa. Después del Vaticano Segundo se ha permitido por autorización de los Obispos que se reciba la comunión en la mano y de pie, hoy por hoy están obligando a muchos Católicos a recibir el Señor en la mano, no en la boca, y a no arrodillarse.
Que profanación, así no era antes.
¿Y que nos dicen todos estos cambios? La Iglesia va en decadencia. ¿Acaso no vemos que están preparando las Iglesias para que sean tal como los templos protestantes, para que podamos atraer personas que no confiesan la fe Católica y que son invitados a profanar a Cristo en la Eucaristía?
¿Que ha hecho el Ecumenismo? No ha hecho absolutamente nada constructivo para la Iglesia, pues ha abierto el camino de diálogos, que son solo pérdida de tiempo. Pues Cristo nos mandó a predicar el evangelio, y también la doctrina que tenemos por más de dos mil años, fruto de la tradición, Jesús NO nos mandó a mezclarnos con los paganos, sino a convertirlos.
Pero el Ecumenismo no hace eso, lo que busca es que aceptemos a los demás como son, que tengamos una fraternidad con los paganos que no es lo que Cristo nos enseñó, el Ecumenismo retira a Cristo de la Religión Católica para hacer que el hombre sea como un Dios que se complace en la fraternidad humana que aprueba todas las religiones.
Y que ha sucedido con la Pandemia del Covid 19 o Coronavirus con relación a la Iglesia? Pues nos ha mostrado los verdaderos colores del Papa, Cardenales, Obispos y Sacerdotes.
No hay coraje en la Iglesia, sino cobardía. Las ovejas se han dispersado, los pastores llenos de miedo se han escondido, se han lavado las manos acerca del problema, pues no aceptan culpa de que los templos estén cerrados, nunca protestaron con valor para hablar de que Dios estaba con nosotros en la Iglesia y no teníamos por que tener miedo alguno. Nunca han dicho que tenemos el verdadero Dios con nosotros, es más, con esta pandemia no han hablado de Dios sino de protocolos humanos para afrontar con miedo la situación como el resto de la humanidad.
Los Sacerdotes están paralizados porque dependen de los Obispos, los Obispos están paralizados porque dependen de la Conferencia Episcopal de sus países y en medio de tanta burocracia y protocolos no han enfrentado los gobiernos. Se esconden detrás del manto de una obediencia falsa, se olvidan que es más importante obedecerle a Dios que a los hombres.
Los Obispos reclaman que están haciendo todo en obediencia a las autoridades de la tierra pero no obedecen el mandato de Cristo de cuidar de las ovejas, pretenden cuidar de sus cuerpos pero no de sus almas.
El Pastor principal de la Iglesia Católica está más interesado en los Musulmanes, los protestantes, los Hindúes, los homosexuales y los políticos de las Naciones Unidas y de la elite mundial que de los propios Católicos. Que vergüenza, ¿donde está nuestra fe? ¿A donde llegó la Iglesia Católica?
La farsa del Coronavirus, una gripa que se cura tan fácilmente, con remedios caseros y con anti-inflamatorios tales como la aspirina, ha servido para doblegar a la Iglesia y para hacerla pecar por no dar testimonio de Cristo. Y ahora que la Iglesia se trata de pararse de su caída no lo va a poder hacer porque desde un principio pecó por no reclamar que Cristo vive en los sacramentos y que nosotros los Católicos somos un pueblo escogido por Dios, con la verdadera presencia suya en medio de nosotros. Pero no hubo fe antes ni la va a haber ahora por parte de muchos representantes de la Iglesia.
En efecto esta epidemia empezó en el Vaticano por la profanación del templo de Dios con la apostasía, la blasfemia, la herejía y la introducción de la pacha mama ídolo del demonio, es un castigo de Dios porque la Iglesia ha entronado la abominación de la desolación con el paganismo, el cambio de doctrina que ha disminuido el rigor de los mandamientos de Dios y ahora permite el libertinaje sexual, y las normas de vida del mundo.
Los Católicos no podemos ser como el resto del mundo, somos un pueblo escogido por Dios, no podemos tener esa mezcla con las demás religiones ni con el paganismo, porque nuestra fraternidad está en la hermandad que tenemos con Cristo en su sangre, no en sonrisas humanas, ni en promesas falsas, ni en asociaciones globales, todo eso es doctrina del demonio.
¿Como puede ser posible que Obispos estén dando órdenes de profanar a Cristo recibiendo la Sagrada Comunión en la mano?, usando guantes, máscaras y otras maneras profanas. Como es posible que en algunos países están poniendo las hostias en bolsas de plástico, para que las lleven los fieles como si Cristo fuera un artículo de supermercado? Y peor aun, haciendo estas cosas que implican que Cristo está contagiado o que es una plaga, la enfermedad misma, algo que nos va a hacer daño con su contagio. Como es posible que un Sacerdote que ha recibido la dignidad de traer a Cristo al altar, decida profanarlo y hacer que los fieles de la Iglesia lo profanen también?
Donde está el respeto para la verdadera Presencia de Cristo en la tierra, Emmanuel, Dios con nosotros? ¿Acaso no vemos que el Clero ha perdido la fe cuando participa de estas atrocidades? ¿Acaso no vemos que la verdadera Iglesia ya está reducida a un pequeño remanente que todavía respeta las enseñanzas del magisterio fiel y que no se adhiere a nuevas doctrinas demoníacas que están siendo promovidas en el espíritu del Anticristo, que con su modernismo está pervirtiendo y destruyendo la Iglesia?
Querido hermano, hermana. No recibas el Señor en la mano, eso es una profanación. Ningún laico puede tocar el cuerpo de Cristo; eso es una profanación. Si un Sacerdote usa guantes para la consagración, eso es una profanación, nunca vayas a recibir a Cristo en una bolsa, como si fuera un cadáver sin dueño de los que llevan a una fosa común.
La Iglesia está dividida, aquellos que aún siguen las enseñanzas del magisterio fiel y aquellos modernistas que se unen para destruir la Iglesia que Cristo fundó.
Estamos viviendo tiempos apocalípticos, muchos sacerdotes menosprecian las revelaciones privadas, las apariciones y mensajes de la Santísima Virgen María, creen que las cosas nunca van a cambiar. Pues bien, las cosas ya cambiaron, nos acercamos al fin.
Esta es una conversación de Luisa Piccarreta con el Señor, esta sierva de Cristo también es conocida como la "Hijita de la Divina Voluntad"
Libro de Cielo: Volumen 12, Febrero 12, 1918
Los iglesias desiertas y sin ministros.
Continuando mi habitual estado, el siempre amable Jesús se hacía ver muy afligido y yo le he dicho: “Amor mío, ¿por qué estás tan afligido?”
Y Él: “¡Ah! hija mía, cuando permita que las iglesias queden desiertas, los ministros dispersos, las misas disminuidas, significará que los sacrificios me son ofensas, las oraciones insultos, las adoraciones irreverencias, las confesiones pasatiempos y sin fruto; por lo tanto, no encontrando más mi gloria, sino ofensas, ni el bien de ellos, no sirviéndome más, los quito; pero este arrancar los ministros de mi santuario significa que las cosas han llegado al punto más malo, y que la diversidad de los castigos se multiplicará.
¡Cómo es duro el hombre, cómo es duro!”
Oremos diariamente para que todos estos malos elementos de la Iglesia no pierdan sus almas.
Oremos para que el Señor ilumine las conciencias de todos los Sacerdotes y reciban el Espíritu Santo, el Espíritu de la Verdad. Oremos para que nosotros los laicos no seamos engañados y terminemos profanando el cuerpo de Cristo.
Oremos para que Dios tenga misericordia de toda la humanidad y conceda la gracia de la verdadera conversión a todas las almas.
Hermanos y hermanas, que Dios nos ayude!
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