¿Señor, que deseas que yo haga, como puedo complacerte?
El Señor
Lo que yo quiero es adoración, adoración, adoración.
Me complace mucho la adoración al Santísimo Sacramento del Altar. Esta es una devoción a my Sagrada Humanidad, quebrantada en la cruz en ofrecimiento al Padre Eterno por la Salvación de toda la humanidad.
Quiero adoración a través de la oración, pero de manera especial ante el Santísimo Sacramento, este tipo de adoración es un acto de reparación que sostiene las manos de la Justicia Divina. Cada alma que hace adoración de esta manera, consigue la salvación de muchas almas, porque la adoración suelta la Gracia y la Misericordia Divina, la adoración a Dios causa que la tierra siga girando.