Jesús
Querido hijo
Quiero que tengas mucha fe. Pues la fe es recompensada porque con ella el hombre pone la confianza en Dios que le ha revelado sus misterios. Para muchos es difícil tener fe porque razonan y resisten las cosas invisibles, resisten por eso mi Espíritu y pierden el regalo de la Gracia. Para aquellos que viven aferrados a las cosas terrenales es imposible tener fe en las cosas celestiales, pues las miran con desprecio. Tanpoco pueden mirar las cosas eternas con respeto porque sus mentes viven aferradas a las cosas temporales y del momento.
Es necesario desear crecer espiritualmente para poder crecer en la fe, la fe a su vez aumenta la Gracia en la persona que la practica y le ayuda a complacer a Dios.