El Padre Eterno
Hijo mío,
No te salgas de la palma de mi mano. Es la adoración la que te ha traído aquí, conmigo tienes un refugio seguro y el temor nunca más entrará en tu vida.
El que vive en mi Presencia recibe abundantemente de mi generosa mano, pide y se le dará, no sufre como tantos, porque confía totalmente en mi Divina Voluntad. Yo lo llevo por mis caminos y le proveo en su necesidad, se siente como caminando en una carpeta roja donde recibe la atención de su creador.
El que vive conmigo encuentra su deleite en mí, al igual que Yo en él, sus días estarán llenos de gozo porque vive atento para hacer mi Voluntad y aceptar con gozo mi Divina Providencia.
Mensajes de Jesús, María
y Dios el Padre.
No te salgas de la palma de mi mano
|